Nuestra historia

Para nosotros, es simple: los zapatos deben diseñarse utilizando lo mínimo indispensable. Deben adaptarse a la anatomía del pie y, al mismo tiempo, permitir que tus pies se muevan como si no llevaras nada puesto.

En 2008, el creador de Lems, Andrew Rademacher, llegó a su fin buscando zapatos que se adaptaran a la forma natural del pie. Comenzó diseccionando sus zapatillas para correr favoritas y eliminando el material sobrante e innecesario, Andrew decidió aprender el arte y la ciencia de la fabricación de calzado a su manera. Estudió calce de calzado, construcción de hormas y patronaje para poder diseñar sus zapatos como ningún otro en el mercado.

Andrew empezó a darse cuenta de que las grandes marcas de calzado se habían equivocado. Los zapatos deben adaptarse a la forma natural del pie humano y no al revés. Esto significaba que un zapato debía ser más ancho en el antepié y en los dedos, al mismo tiempo que permitiera total flexibilidad y movimiento sin restricciones.

Después de tres años de investigación, innumerables horas de diseño y docenas de prototipos, el enfoque inquebrantable de Andrew finalmente dio sus frutos. En septiembre de 2011, Lems lanzó su primer producto: Primal. Aunque la empresa ha recorrido un largo camino desde ese diseño original, Andrew continúa estudiando su arte mientras se mantiene fiel a su misión de fabricar calzado de ajuste natural que permita a sus pies la libertad de ser tal como lo concibió la naturaleza.

"Si no puedes encontrarlo en el mercado y nadie lo hace, entonces tienes que hacerlo tú mismo". -Andrew Rademacher